Habrá que hablar algo de música, no?
vamos entonces con un par de bandas / artistas que aunque beben de fuentes diferentes, ambas toman el folk como punto de partida para dar forma a unos discos más que recomendables.
Por una parte Jens Carelius, que aunque suene más británico que la corneta de la caza del zorro, viene de un poco más al norte, de Noruega concretamente.
Y qué hace un melenudo noruego con una guitarra para evitar los largos inviernos por allí arriba? pues empaparse de los discos de Nick Drake, Richard Thompson, Bert Jansch y compañía, y componer los temas de este recomendable disco, un trabajo que merece ser destacado y conocido por todos los amantes de estos bucólicos sonidos, sobre todo gracias a joyas como "the talent" o "the visit", dos de los puntales sobre los que se sostiene "the beat of the travel", un perfecto viaje en el tiempo con el que si te abstraes un poco de todo lo que te rodea, conseguirás visualizarte tirado en un parque con una flor en la oreja.
Por la otra, The Kingbury Manx vuelven a la carga con un trabajo que les debería haber puesto casi a la altura de los últimos Vetiver, los que parecen haber encontrado la fórmula perfecta para integrar elementos de décadas pasadas en una propuesta que suena de lo más actual.
The Kingsbury Manx se acercan sin sobrepasar a los de Andy Cabic (vaya racha de discos llevan Vetiver ..), pero cuando se ponen más optimistas y sacan de paseo la vena alegre, los coros y las melodías contagiosas, se ponen a tiro y avisan: "cuidado que el siguiente disco igual nos sale una obra maestra y la liamos". Hasta entonces, siguen en una modesta segunda división, sin sacar demasiado ruido pero alegrando mañanas a unos cuantos.
Por una parte Jens Carelius, que aunque suene más británico que la corneta de la caza del zorro, viene de un poco más al norte, de Noruega concretamente.
Y qué hace un melenudo noruego con una guitarra para evitar los largos inviernos por allí arriba? pues empaparse de los discos de Nick Drake, Richard Thompson, Bert Jansch y compañía, y componer los temas de este recomendable disco, un trabajo que merece ser destacado y conocido por todos los amantes de estos bucólicos sonidos, sobre todo gracias a joyas como "the talent" o "the visit", dos de los puntales sobre los que se sostiene "the beat of the travel", un perfecto viaje en el tiempo con el que si te abstraes un poco de todo lo que te rodea, conseguirás visualizarte tirado en un parque con una flor en la oreja.
Por la otra, The Kingbury Manx vuelven a la carga con un trabajo que les debería haber puesto casi a la altura de los últimos Vetiver, los que parecen haber encontrado la fórmula perfecta para integrar elementos de décadas pasadas en una propuesta que suena de lo más actual.
The Kingsbury Manx se acercan sin sobrepasar a los de Andy Cabic (vaya racha de discos llevan Vetiver ..), pero cuando se ponen más optimistas y sacan de paseo la vena alegre, los coros y las melodías contagiosas, se ponen a tiro y avisan: "cuidado que el siguiente disco igual nos sale una obra maestra y la liamos". Hasta entonces, siguen en una modesta segunda división, sin sacar demasiado ruido pero alegrando mañanas a unos cuantos.
2 comentarios:
yo no sé de dónde sacas estos discos, pero se agradece que los compartas con tus lectores. A ver qué tal suenan! :)
¡Qué alegria me das con lo de Kingsbury Manx. Conozco sus dos primeros discos y me parecen buenísimos. Los tenia un poco olvidados pero los recuperaré.
Publicar un comentario